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El signo de Noé

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Continuamos en orden cronológico desde el principio (es decir, Adán/Eva y Qabil/Habil) y nuestro próximo profeta digno de mención en la Torá es Noé (la paz sea con él), que vivió unos 1600 años después de Adán. Muchas personas en el occidente encuentran increíble la historia del Profeta Noé (la paz sea con él) y la inundación. Pero el mundo está cubierto de rocas sedimentarias, que se forman depositando sedimentos durante una inundación. Así que tenemos evidencia física de este diluvio, pero ¿cuál fue la señal de Noé a la que debemos prestar atención? Hacer clic aquí para leer el relato de Noé (la paz sea con él) en el Torá y el Corán.

Ausencia vs. Recibir Misericordia

Cuando hablo con los occidentales sobre el Juicio de Alá, la respuesta que recibo a menudo es algo así como: “No estoy demasiado preocupado por el Juicio porque Él es tan misericordioso que no creo que realmente me juzgue”. Es este relato de Noé (la paz sea con él) lo que me hizo cuestionar realmente ese razonamiento. Sí, Alá es misericordioso, y como Él no cambia, también estaba lleno de misericordia en los días de Noé (la paz sea con él). Sin embargo, el mundo entero (aparte de Noé y su familia) fue destruido en ese juicio. Surah Nuh (Surah 71 – Noah) nos dice que:

Por sus pecados, fueron anegados e introducidos en un Fuego. No encontraron quien, fuera de Alá, les auxiliara. (Sura Noh 71:25)

Entonces, ¿dónde estaba Su misericordia entonces? estaba en el arca. Como nos dice el Corán:

Así, pues, les salvamos, a él y a quienes estaban con él en la nave. (Surah 7:64 – Los lugares elevados)

Alá en Su Misericordia, usando al profeta Noé (la paz sea con él), proporcionó un arca que estaba disponible para cualquiera. Cualquiera podría haber entrado en esa arca y recibir misericordia y seguridad. El problema fue que casi todas las personas respondieron al mensaje con incredulidad. Se burlaron de Noé (la paz sea con él) y no creyeron en el Juicio venidero. Si tan solo hubieran entrado en el arca, habrían escapado del Juicio.

El pasaje del Sagrado Corán también nos dice que uno de los hijos de Noé creía en Alá y en el Juicio venidero. El mismo hecho de que estaba tratando de escalar una montaña muestra que estaba tratando de escapar del juicio de Alá (por lo tanto, debe haber creído en Alá y en el Juicio). Pero de nuevo había un problema. No combinó su creencia con la sumisión y optó por decidir encontrar su propia forma de escapar del Juicio. Pero su padre le dijo:

«Hoy nadie encontrará protección contra la orden de Alá, salvo aquél de quien Él se apiade». (Surah Hud 11:43)

Este hijo necesitaba la Misericordia de Alá, no sus propios esfuerzos para escapar del Juicio. Sus esfuerzos por escalar una montaña fueron inútiles. Así que el resultado para él fue exactamente el mismo que el de aquellos que se burlaron del Profeta Noé (la paz sea con él): muerte por ahogamiento. Si tan solo hubiera entrado en el arca, también habría escapado del Juicio. De esto podemos saber que la sola creencia en Alá y el Juicio no es suficiente para escapar de él. De hecho, es al someternos a la Misericordia que Alá proporciona, en lugar de a nuestras propias ideas, donde podemos estar seguros de que recibiremos Misericordia. Esta es la señal de Noé para nosotros: el arca. Era una Señal pública del Juicio de Alá, así como Su medio de Misericordia y escape. Si bien todos podían ver cómo se construía, era esa ‘señal clara’ tanto del Juicio venidero como de la Misericordia disponible. Pero muestra que Su misericordia solo es alcanzable a través de la provisión que Él ha establecido.

Entonces, ¿por qué Noé encontró la Misericordia de Alá? La Torá repite varias veces la frase

Noé hizo todo de acuerdo con lo que el Señor le había mandado.

Me doy cuenta que tiendo a hacer lo que entiendo, o lo que me gusta, o con lo que estoy de acuerdo. Estoy seguro de que Noé (la paz sea con él) debió haber tenido muchas preguntas en su mente sobre la advertencia de Alá de una inundación venidera y su orden de construir un arca tan grande en la tierra. Estoy seguro de que pudo haber razonado que, dado que era un buen hombre en otras áreas, tal vez no necesitaba prestar atención a la construcción de este arca. Pero hizo ‘todo lo‘ que fue ordenado, no solo lo que su padre le había dicho, no lo que entendió, no con lo que se sentía cómodo, y ni siquiera lo que tenía sentido para él. Este es un gran ejemplo que debemos de seguir.

La puerta para la salvación

La Torá también nos dice que después de que Noé, su familia y los animales entraron en el arca que

Luego el Señor cerró la puerta del arca. (Génesis 7:16)

Fue Alá quien controló y manejó la única Puerta al arca, no Noé (la paz sea con él). Cuando vino el Juicio y vinieron las aguas, ninguna cantidad de golpes en el arca por parte de la gente de afuera pudo mover a Noé a abrir la puerta. Alá controló esa única puerta. Pero al mismo tiempo, los que estaban dentro podían descansar en la confianza de que, Alá controlaba la puerta, entonces ningún viento ni ola podía forzarla a abrirse. Estaban a salvo adentro del cuidado y la Misericordia de Alá.

Ya que Alá no cambia, esto también se aplicaría a nosotros hoy. Todos los profetas advierten que viene otro Juicio – y este por fuego – pero la señal de Noé (la paz sea con él) nos asegura que junto con Su Juicio Él ofrecerá Misericordia. Pero debemos buscar su ‘arca’ con una puerta que garantizará recibir Misericordia.

Sacrificio de los profetas

El Torá también nos dice que Noé (la paz sea con él):

construyó un altar al Señor, y sobre ese altar ofreció como holocausto animales puros y aves puras. (Génesis 8:20)

Esto se ajusta al patrón de Adán/Eva y Qabil/Habil de sacrificar animales. Esto significa, una vez más, que mediante la muerte de un animal y el drenaje de sangre fue como el Profeta Noé (la paz sea con él) oró y fue aceptado por Alá. De hecho, la Torá dice que justo después de este sacrificio, Alá ‘bendijo a Noé y a sus hijos’ (Génesis 9:1) e ‘hizo un pacto con Noé’ (Génesis 9:8) de nunca más juzgar a todas las personas con un diluvio. Entonces parece que el sacrificio, la muerte y el drenaje de la sangre de un animal por parte de Noé fueron cruciales en su adoración a Alá. ¿Qué tan importante es esto? Continuamos nuestra encuesta a través de los Profetas de la Torá, con Lote/Lut siguiente.

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